La arrugas son pliegues, marcas o surcos que aparecen en la piel debido a diversos factores. El proceso de envejecimiento es uno de los motivos más importantes pero no el único, lo que hace que no exista una edad exacta para la aparición de las primeras arrugas. En algunas personas empiezan a aparecer a los 40, en otras a los 50 y en otras con 20 años ya empiezan a manifestarse; lo cual dependerá del tipo de piel, de cómo la hayamos cuidado y de la genética familiar.
Existen diferentes clasificaciones de las arrugas en función de su origen:
- Arrugas de expresión: Son arrugas causadas por el movimiento de los diferentes músculos faciales. Uno de los tratamientos más eficaz es la toxina botulínica.
Dentro de estas tenemos las arrugas del entrecejo, de la frente, las patas de gallo y las de alrededor de los labios o peribucales.
- Arrugas gravitacionales: Son arrugas provocadas por los efectos de la gravedad y se evidencian cuando la piel empieza a hundirse y a plegarse. Suelen aparecer en aquellas zonas con un grosor de piel determinado. Para este tipo de arrugas o surcos es fundamental recuperar los volúmenes perdidos con fillers (ácido hialurónico, hidroxiapatita Ca, hilos tensores de PDO, etc.).
Dentro de este grupo tenemos el surco nasoyugal, el surco nasogeniano y las líneas de marioneta.
- Arrugas por fotoenvejecimiento: Son pliegues en la piel que con el tiempo se van convirtiendo en permanentes, debidos especialmente a la sobreexposición solar. La mejor manera de evitar su aparición es la protección solar todo el año.
Se producen principalmente en la mejilla, el labio superior, párpados, cuello y escote.
El envejecimiento y el paso de los años es el responsable principal de su aparición antes o después, no existiendo una edad concreta para su aparición, debido a los cambios que se van produciendo en las diferentes capas de la piel. A nivel epidérmico se produce una pérdida de ácido hialurónico, alteraciones en la calidad y estructura de la dermis por ralentización de la síntesis de colágeno y desorganización de las fibras de colágeno, y la pérdida y desplazamiento de los compartimentos grasos. Además, podemos señalar otros factores responsables de su aparición temprana, incluso antes de los 30, como es la propia genética del paciente, alimentación desequilibrada, cambios bruscos de peso, vida sedentaria, ejercicio muy intenso, el consumo de tabaco y la sobreexposición solar; siendo estas dos últimas las causas principales de que las arrugas aparezcan antes y que sean mucho más profundas.